La seguridad es una actitud
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La seguridad es una actitud
Tú también formas parte del equipo de seguridad, al apoyarnos a mantener segura la información y los datos con la que trabajas todos los días.
Así como existen actividades y buenas prácticas que puedes aplicar, también existen actividades que pueden poner en riesgo la información.
La seguridad de la información se rige por tres principios básicos:
- Confidencialidad: Sólo aquellos usuarios que han sido autorizados pueden tener acceso a la información.
- Integridad: La información sólo puede ser modificada o eliminada por aquellos usuarios que han sido autorizados.
- Disponibilidad: La información debe estar disponible en el momento que se necesite.
Todos tenemos un papel importante cuidando y aplicando estos principios en nuestro día a día. Como parte de la comunidad universitaria debemos:
- Utilizar la herramienta adecuada: Sé consciente dónde almacenas la información con la que trabajas todos los días, siempre será mejor utilizar las plataformas institucionales como OneDrive o colaboración en https://portal.office.com ya que estas plataformas nos ayudan a cumplir con los tres principios básicos.
Utilizar plataformas libres o asociadas a cuentas personales de correo puede no ser la mejor opción para cumplir esto, todo depende del tipo de actividad y la información que administras. Siempre puedes consultar con nosotros si tienes alguna duda o preocupación al respecto.
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Hacer los básicos: Existen múltiples recomendaciones que hemos compartido contigo en boletines anteriores, como ejemplo algunas de ellas:
- Acostumbra a cerrar las sesiones al terminar. Cerrar las sesiones en aplicaciones y sistemas cuando ya no haremos uso de ellas, ya sea por un tiempo prolongado o al terminar nuestras actividades, es una manera de ayudar a proteger nuestra información. De esta manera mantenemos la confidencialidad y la integridad de los datos.
- Olvídate de compartir tu contraseña. Tu contraseña es personal y debes tratarla como tal, ésta te permite acceder a distintos tipos de información necesaria para tus actividades y te identifica en nuestros sistemas, por ello es importante que la mantengas privada.
- Se escéptico: Implica desconfiar sanamente de lo que vemos en internet, si un sitio te pide descargar o actualizar un elemento del sistema para visualizar contenido, es muy probable que se trate de un engaño si no es el sitio oficial o nunca antes te había solicitado algo similar.
- Desconfía de los archivos que recibes en tu correo. Esto siempre ha sido una constante en la lista de los principales riesgos para las organizaciones, si no has solicitado algún archivo o correo sobre estados de cuenta o algún aviso de un servicio lo más probable también es que sean maliciosos.
- Pedir ayuda: Si te encuentras con alguna situación que involucre el tratamiento de datos o alguna duda en general, sobre algún correo o archivo adjunto, siempre puedes consultarnos. En seguridad la duda puede llevarnos a tomar decisiones incorrectas.
¡Recuerda, en la seguridad participamos todos!